¿Cómo se reconoce el trabajo protocolar de un líder?
¿Cómo se reconoce el trabajo protocolar de un líder?
Por: Heber Reyes
Para usted conformar un gran equipo de trabajo compuesto por personas que estén dispuestas a entregarlo todo, lo primero que debe tener ese equipo es un líder.
¿Un líder? Así como lo acaba de leer.
El líder, tiene la capacidad de ver y reconocer lo que a muchos les cuesta y le molesta, que es, reconocer a quienes día tras día trabajan para la institución o empresa, así también para quienes las dirigen.
Con el tiempo, he aprendido a motivar y a reconocer a quienes siempre me han acompañado en las distintas labores que juntos hemos realizado. Porque, en medio de la responsabilidad, la presión del trabajo y del resultado que se espera, debe existir ese líder que predica con el ejemplo y que motiva a su equipo sin importar las adversidades y la falta de reconocimiento cuando en determinados momentos es más necesario. Y es que, un líder entrega más de lo que recibe para él y para su equipo. ¿Saben por qué? Porque los líderes están dotados de una visión humana que por lo general difiere de la mayoría, y que los mismos son capaces de dar todo por su equipo, apegado a su principio de justicia.
Un líder se preocupa por la capacitación de su equipo, de su bienestar económico, de su preparación profesional, de su salud, de ver que emocionalmente y familiarmente todo esté marchando bien.
Un líder predica con el ejemplo ante su equipo que le acompaña, y les enseña el valor acerca de la responsabilidad en el trabajo, de la honestidad, sinceridad, lealtad, amabilidad, bondad, disciplina, compromiso, respeto, y de la dedicación que brindamos cuando cargamos en nuestros hombros todo el peso de quienes han puesto su confianza en ese líder y todo su equipo.
Sin embargo, con el tiempo he conocido personas que predican ser líderes ante su equipo, pero, eso no es más que un simple discurso para establecer su diferencia con quienes les rodean. Las características de un líder, no se profanan, ya que por lo general, el líder recibe ese título de quienes les acompañan y conviven con él la mayor parte del tiempo, ya sea en el trabajo, en grupos sociales, deportivos, políticos, culturales, académicos, religiosos, y hasta en su propia familia, etc…
En otras palabras, la capacidad visionaria de un líder en el ámbito protocolar es, motivar, valorar y reconocer en lo más mínimo, cada detalle asumido por su equipo, porque, un líder no es líder, si el mérito sólo se lo atribuye él y sólo él.
Finalmente, los líderes están forjados de grandes principios y valores humanos que, con relación a la mayoría, hacen la diferencia por ser auténticos, leales y honestos en todas sus responsabilidades y en su vida particular.